¿Cómo fue la historia de España en el siglo XVII?
El siglo XVII en España estuvo marcado por el reinado de los Austrias menores, quienes delegaron los asuntos de gobierno a los validos, aristócratas de su confianza. Durante este siglo, la monarquía española se vio envuelta en varios conflictos, como la guerra de los Treinta Años y un conflicto con las Provincias Unidas de los Países Bajos. También tuvo que enfrentar problemas internos, como una sublevación en Cataluña y una guerra que resultó en la independencia de Portugal
A pesar de las pérdidas territoriales en Europa y la crisis demográfica y económica que afectó a la sociedad española, el siglo XVII fue un período de esplendor para las artes plásticas y la literatura, con la creación de las obras maestras del Barroco y la publicación de varias obras fundamentales del Siglo de Oro español
La España de los Austrias menores (siglo XVII)
El reinado de la Casa de Habsburgo en España comenzó en el siglo XVI con la entronización de Carlos I de España y, posteriormente, de su hijo Felipe II. Estos extendieron las fronteras del Imperio español y fueron llamados los Austrias mayores
Estos reyes se caracterizaron por dejar las decisiones políticas a cargo de validos, hombres de confianza del rey que no ocupaban cargos institucionales. Entre los más conocidos se contaron el duque de Lerma (en el reinado de Felipe III) y el conde-duque de Olivares (en el reinado de Felipe IV)
Los conflictos internos en España en el siglo XVII
A estas tensiones de tipo político se les unieron, en el siglo XVII, las derivadas de la crisis económica y social que atravesó la monarquía hispánica. Por ejemplo, en 1609 Felipe III decretó la expulsión de los moriscos (musulmanes convertidos al catolicismo), lo que provocó el despoblamiento de algunas regiones, especialmente en los reinos de Aragón y Valencia, y generó escasez de mano de obra agrícola
Por otro lado, el conde-duque de Olivares, valido de Felipe IV, intentó que todos los reinos de la monarquía española aportaran sus recursos para financiar la guerra, en un período en el que España se había involucrado en la guerra de los Treinta Años (1618-1648). Este proyecto, llamado Unión de Armas, provoca la crisis de 1640
La crisis de 1640 en España
En resumen, la Crisis de 1640 fue un momento de agitación política y social en la Monarquía Hispánica, marcado por levantamientos populares, revueltas y tensiones internas. La soberanía de la casa de los Austrias estuvo en peligro, y la historia de España se vio profundamente afectada por estos eventos
La crisis tuvo lugar durante el reinado de Felipe IV de España. Entre las causas principales se encuentra el proyecto de Unión de Armas propuesto por el valido Conde-Duque de Olivares
La Monarquía Hispánica era una monarquía compuesta que incluía los reinos de Castilla, Aragón y Portugal. Cada uno de estos reinos tenía sus propias leyes, fueros y privilegios, lo que limitaba la autoridad del rey católico en sus Estados. Mientras en la Corona de Castilla gozaba de amplia libertad de acción, en los estados de la Corona de Aragón y en Portugal, su autoridad estaba considerablemente restringida, Cataluña se sublevó contra el gobierno central
El ocaso del Imperio español en Europa en el siglo XVII
La Guerra de los Treinta Años
Fue un conflicto devastador que tuvo lugar en Europa Central entre los años 1618 y 1648. En esta guerra, intervinieron la mayoría de las grandes potencias europeas de la época, y su impacto marcó el futuro del continente en los siglos posteriores
- Orígenes y Contexto: La guerra se desencadenó por tensiones religiosas. Las luchas entre católicos y protestantes, así como las rivalidades entre las casas de los Habsburgo y los Borbones
- Comenzó con la Revolución de Bohemia en 1618, donde los nobles protestantes se sublevaron contra el emperador católico
- Francia, bajo el cardenal Richelieu, apoyó a los protestantes y luchó contra los Habsburgo
- Paz de Westfalia: El conflicto finalizó con la firma de la Paz de Westfalia en 1648, que tuvo importantes consecuencias territoriales y religiosas
- La guerra de los Treinta Años se inició con victorias como la Toma de Breda
- Resultados:
- Fin del predominio de los Habsburgo: La guerra debilitó el poder de la Casa de Habsburgo y marcó el inicio del dominio de los Borbones
- Independencia de las Provincias Unidas: Las Provincias Unidas (Países Bajos) obtuvieron su independencia
- Separación del Sacro Imperio Romano Germánico: El imperio se disgregó y perdió parte de su autoridad central
- Legalización del calvinismo: Se reconoció oficialmente el calvinismo como una religión fidedigna
Paz de Westfalia
La Paz de Westfalia se refiere a los dos tratados de paz de Osnabrück y Münster, firmados el 24 de octubre de 1648. El último de estos tratados se llevó a cabo en la Sala de la Paz del ayuntamiento de Münster, en la región histórica de Westfalia. Estos tratados pusieron fin a la Guerra de los Treinta Años en Alemania y a la Guerra de los Ochenta Años entre España y los Países Bajos.
En la Paz de Westfalia participaron varios actores importantes, incluyendo al emperador del Sacro Imperio Romano Germánico, la Monarquía Hispánica, los reinos de Francia y Suecia, las Provincias Unidas (Países Bajos) y sus respectivos aliados entre los príncipes del Sacro Imperio Romano Germánico. Este evento marcó el nacimiento del Estado nación y estableció el principio de que la integridad territorial es el fundamento de la existencia de los estados. Hasta la instauración de la Confederación del Rin en 1806, las reglas de Westfalia formaron parte de las leyes constitucionales del Sacro Imperio Romano. Las garantías del Tratado fueron asumidas por los países fronterizos con el Sacro Imperio: Francia y Suecia.
En resumen, la Paz de Westfalia tuvo un impacto significativo en la configuración del sistema internacional moderno y en la autonomía de los estados resultantes en Europa central. Fue un hito importante en la historia diplomática y política de la época
Toma de Breda
La toma de Breda es un acontecimiento histórico que ha sido representado en diferentes momentos y contextos. Permíteme ofrecerte información sobre dos momentos clave relacionados con Breda:
Toma de Breda en 1581:
– En 1581, durante la Guerra de los Ochenta Años, tuvo lugar la toma de Breda. Esta acción, también conocida como “La furia de Haultepenne”, ocurrió el 26 y 27 de julio. El gobernador de los Países Bajos en ese momento era Alejandro Farnesio, duque de Parma. Sin embargo, no se trató de un asedio convencional, sino de una lucha dentro de las murallas de la ciudad.
Toma de Breda en 1625:
– En 1625, durante la Guerra de los Treinta Años, la ciudad holandesa de Breda fue asediada por las tropas de los Habsburgo, comandadas por el general Ambrosio Spínola. Después de casi un año de asedio, Breda finalmente se rindió a los españoles el 5 de junio de 1625. Este hecho histórico fue plasmado de manera genial por el pintor Diego de Velázquez en su famoso cuadro “La rendición de Breda” (también conocido como “Las Lanzas”). En esta obra, Velázquez enfatiza la clemencia de Spínola hacia el enemigo derrotado.
La situación económica y social en la España del siglo XVII
El siglo XVII fue un período de crisis económica en Europa en general y, especialmente, en la Península Ibérica. En la primera mitad del siglo XVII aparecieron serios problemas demográficos. Algunas epidemias, como las de peste, se repitieron periódicamente y coincidieron con épocas de carestía y hambre. El comercio también entró en una fase recesiva
Esta crisis económica llevó al empobrecimiento del campesinado (que constituía la mayor parte de la población), la debilidad de la burguesía y las clases medias, y el crecimiento numérico de los grupos sociales improductivos (como la nobleza y el clero, en un extremo, y los marginados, en el otro)
La cultura española en el siglo XVII
La mentalidad de la nobleza española
En el siglo XVII, la sociedad española siguió marcada por los valores aristocráticos y religiosos del siglo anterior. El honor y la dignidad fueron reivindicados por los grupos sociales. Entre los nobles fue también característico el rechazo a los trabajos manuales. Esta mentalidad se apoyaba en los privilegios que detentaba la nobleza: exención de pagar impuestos directos. Las personas con medios económicos no se dedicaban tanto a hacer inversiones productivas en la agricultura, el comercio o la artesanía como a buscar el medio de ennoblecerse
El Siglo de Oro español
En el siglo XVII, el arte y la literatura en España vivieron una época de esplendor sin precedente. El Siglo de Oro español comenzó antes de la época de los Austrias menores, pero durante el siglo XVII se destacaron:
- Miguel de Cervantes (1547-1616), autor de El ingenioso hidalgo don Quijote de La Mancha (1605 y 1615) y otras novelas
La mayor parte de estos escritores dieron forma a lo que se llamó literatura barroca, que expresaba un profundo pesimismo. Por otro lado, la pintura española del Barroco fue uno de los momentos claves de la historia de la pintura mundial
La pérdida de la hegemonía española en Europa
La pérdida de la hegemonía española en Europa fue un proceso gradual que ocurrió durante el siglo XVII y principios del XVIII. Varios factores contribuyeron a este declive:
Guerras y conflictos:
- Las continuas guerras, como la Guerra de los Treinta Años y las Guerras de Italia, agotaron los recursos financieros y militares de España.
- La Guerra de Sucesión Española (1701-1714) fue especialmente dañina para la posición de España en Europa.
Problemas económicos:
- La dependencia de la plata y el oro de las colonias americanas hizo que la economía fuera vulnerable a las fluctuaciones de estos mercados.
- La inflación, el alto costo de mantener un imperio y la competencia comercial de otras potencias europeas debilitaron la economía española.
Cambios políticos y territoriales:
- El Tratado de Utrecht (1713) resultó en la pérdida de territorios clave para España y marcó el fin de su dominio en Europa.
- El ascenso de otras potencias, como Francia y Gran Bretaña, desplazó a España del centro del poder europeo.
Reformas internas insuficientes:
- A pesar de los esfuerzos de monarcas como Carlos III por modernizar el estado, las reformas no fueron suficientes para revertir el declive.
Este período de transición marcó el fin de la era dorada de la influencia española en Europa y el comienzo de un nuevo orden internacional en el que otras naciones emergieron como potencias dominantes.
