La Prehistoria en la península ibérica
La Prehistoria en la península ibérica es un período fascinante que abarca desde la llegada de los primeros homínidos hasta el desarrollo de las primeras civilizaciones y la escritura. Este largo período se divide en varias etapas, cada una con sus propias características y desarrollos culturales:
Paleolítico: Durante el Paleolítico, los primeros habitantes eran cazadores-recolectores nómadas. Se han encontrado importantes sitios arqueológicos, como las cuevas de Altamira, famosas por sus pinturas rupestres.
Mesolítico: Este período se caracteriza por una transición hacia un clima más templado y cambios en la fauna y flora, lo que llevó a una adaptación en las estrategias de subsistencia de los grupos humanos.
Neolítico: Marcado por la introducción de la agricultura y la ganadería, el Neolítico supuso una revolución en el modo de vida, con el establecimiento de asentamientos permanentes y el desarrollo de la cerámica.
Edad de los Metales: Dividida en la Edad del Cobre, la Edad del Bronce y la Edad del Hierro, esta etapa vio el surgimiento de la metalurgia y el comercio a larga distancia, así como la formación de complejas sociedades y culturas, como la Tartésica y la Ibera.
El proceso de hominización
El proceso de hominización se refiere a la evolución de los seres humanos desde nuestros ancestros primates hasta el Homo sapiens actual. Este proceso abarca millones de años y es caracterizado por una serie de cambios anatómicos y comportamentales, que incluyen el desarrollo del bipedismo, el aumento del tamaño cerebral, y la elaboración de herramientas complejas.
Aquí hay algunos puntos clave sobre el proceso de hominización:
- Bipedismo: La habilidad de caminar en dos piernas, lo que liberó las manos para otras funciones como el uso de herramientas.
- Aumento del tamaño cerebral: El cerebro humano se expandió significativamente, especialmente en áreas relacionadas con el pensamiento complejo, la planificación y el lenguaje.
- Uso de herramientas: La fabricación y uso de herramientas se volvió más sofisticada a lo largo del tiempo, lo que permitió a los humanos adaptarse a diferentes entornos y sobrevivir.
- Cambio en la dieta: La dieta se diversificó y pasó de ser principalmente herbívora a incluir una mayor cantidad de proteínas animales.
- Desarrollo social y cultural: Se observa un aumento en la complejidad de las estructuras sociales y las expresiones culturales, como el arte y las ceremonias rituales.
Los primeros humanos en la península ibérica
Los primeros humanos conocidos en la península ibérica son los Homo antecessor, que se cree que vivieron hace aproximadamente 800,000 a 1 millón de años. Estos primeros habitantes son conocidos principalmente a través de los hallazgos arqueológicos en Atapuerca, una serie de cuevas en el norte de España donde se han encontrado algunos de los fósiles humanos más antiguos de Europa.
Los restos de Homo antecessor sugieren que eran cazadores y recolectores con una estructura social y habilidades para fabricar herramientas de piedra. También se cree que podrían haber sido una de las primeras especies humanas en practicar el canibalismo como un acto social o ritual.
Con el tiempo, la península ibérica fue habitada por otras especies humanas, incluyendo Neandertales y eventualmente Homo sapiens. La región es rica en sitios arqueológicos que ofrecen una ventana a estas antiguas culturas humanas.
El Paleolítico Superior
El Paleolítico Superior es la última fase del Paleolítico, que tuvo lugar aproximadamente entre 40,000 y 10,000 años antes del presente. Durante este período, se produjeron importantes avances en la tecnología y la cultura de los humanos modernos, Homo sapiens. Aquí hay algunos aspectos destacados de esta era:
Arte rupestre: El arte se desarrolló significativamente, con pinturas y grabados en cuevas como las de Altamira en España y Lascaux en Francia, que muestran una gran habilidad y un profundo simbolismo.
Herramientas: Las herramientas de piedra se volvieron más sofisticadas y especializadas, incluyendo puntas de lanza, cuchillos y raspadores. También se utilizaban materiales orgánicos como hueso, marfil y asta para fabricar herramientas y objetos de arte.
Comportamiento simbólico: Se evidencia un comportamiento simbólico y ritual, como el enterramiento de los muertos con ofrendas y la posible práctica de rituales.
Expansión geográfica: Los humanos se dispersaron por una mayor área geográfica, llegando a regiones que anteriormente estaban inhabitadas, como el norte de Europa y Siberia.
Interacción con otras especies: Durante el Paleolítico Superior, los humanos modernos convivieron y posiblemente interactuaron con otras especies humanas, como los Neandertales, que se extinguieron hacia el final de este período.
El Paleolítico Superior fue un período de gran innovación y adaptación, que sentó las bases para las complejas sociedades humanas que surgirían en el Mesolítico y el Neolítico.
Las Etapas del Paleolítico
Paleolítico Inferior (800.000-90.000 a.C) | Paleolítico Medio (90.000-35.000 a.C) | Paleolítico Superior y Epipaleolítico (90.000-35.000 a.C) | |
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Hábitat y útiles |
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Yacimientos importantes |
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El Mesolítico
El Mesolítico es un período de la prehistoria que marca la transición entre el Paleolítico y el Neolítico. El término “Mesolítico” proviene del griego, donde “mesos” significa “medio” y “líthos” se traduce como “piedra”. A diferencia del Paleolítico (la Edad Antigua de la Piedra) y el Neolítico (la Edad Nueva de la Piedra), el Mesolítico se identifica con las últimas sociedades de cazadores-recolectores
Hábitos nómadas: Las culturas mesolíticas eran principalmente nómadas, con asentamientos estacionales de invierno y campamentos de verano. Sin embargo, en algunas regiones costeras europeas y en el Oriente Próximo, donde había recursos suficientes y regulares, comenzaron a vivir de manera más sedentaria.
Ampliación de la dieta: Los grupos mesolíticos ampliaron su dieta para incluir una gran variedad de alimentos que los cazadores especializados del Paleolítico superior no consumían. Esto les permitió adaptarse mejor a diferentes entornos.
Utensilios líticos: Durante el Mesolítico, hubo una mayor diversificación, especialización y cantidad de utensilios líticos utilizados por estas sociedades.
Arte abstracto: A medida que desapareció la pintura rupestre figurativa paleolítica, surgió un arte más abstracto en el Mesolítico.
El Arte Mobiliar | El Arte Parietal de la zona Levantina | El Arte Parietal de la zona Cantábrica | |
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Restos del Mesolítico |
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El Neolítico
El Neolítico, o Nueva Edad de Piedra, fue un período revolucionario en la historia humana que comenzó alrededor de 10,000 años antes del presente y duró hasta aproximadamente 4,500 años antes del presente en la península ibérica. Este período se caracteriza por una serie de transformaciones fundamentales en el modo de vida de las sociedades humanas:
Agricultura y Ganadería: La domesticación de plantas y animales llevó a la agricultura y la ganadería, permitiendo a las comunidades establecerse en un lugar y cultivar sus propios alimentos.
Asentamientos Permanentes: Con la capacidad de producir alimentos, las personas comenzaron a vivir en asentamientos permanentes, como aldeas y pequeñas ciudades.
Desarrollo de la Cerámica: La invención de la cerámica permitió almacenar alimentos y transportar líquidos, lo que fue crucial para las sociedades agrícolas.
Herramientas y Tecnología: Se desarrollaron herramientas más avanzadas para la agricultura, como hoces y molinos de mano para procesar granos.
Estructuras Sociales: Se formaron estructuras sociales más complejas, con una división del trabajo y una jerarquía social emergente.
Arte y Religión: Aparecieron nuevas formas de expresión artística y prácticas religiosas, incluyendo figuras de diosas de la fertilidad y monumentos megalíticos como dólmenes y menhires.
En la península ibérica, el Neolítico es especialmente notable por los impresionantes monumentos megalíticos y las pinturas rupestres que datan de este período. Lugares como el conjunto de dólmenes de Antequera y la cueva de El Castillo ofrecen ejemplos destacados de la riqueza cultural de esta era.
Neolítico inicial
La primera fase del Neolítico peninsular se desarrolló fundamentalmente alrededor del Mediterráneo y sobre todo en la costa valenciana. Los asentamientos son fundamentalmente en cuevas y se identifican por la presencia de cerámica cardial, llamada así por su decoración con conchas de molusco y por la aparición de los primeros utensilios relacionados con los trabajos agrícolas
Neolítico pleno
Entre el final del quinto y el tercer milenio antes de Cristo, se desarrolló una segunda fase de estas comunidades agrícolas. En esta etapa los yacimientos no se sitúan en zonas montañosas, sino que ocupan las tierras fértiles y bien regadas de los Llanos y los que se construyeron poblados estables
En el sureste peninsular destacan el yacimiento de carihuela y la llamada cultura de Almería, con viviendas circulares. En el noroeste peninsular se desarrolló la denominada cultura de los sepulcros de fosa, donde los difuntos eran enterrados en fosas excavadas en el suelo insistas o en sepulcros de corredor y acompañados de una mujer funerario
El Eneolítico
El Eneolítico, también conocido como Edad del Cobre, es un período crucial en la prehistoria que se encuentra entre el Neolítico y la Edad del Bronce. Aquí tienes un resumen de sus características:
Transición: El Eneolítico marca la transición entre las sociedades agrícolas del Neolítico y las civilizaciones que dominaron la Edad del Bronce. Durante este período, hubo importantes cambios culturales y tecnológicos.
Metalurgia del cobre: El nombre “Eneolítico” proviene del uso creciente del cobre en herramientas y objetos. Las comunidades comenzaron a trabajar con metales, lo que marcó un hito en la historia humana.
Agricultura y ganadería: Aunque la agricultura y la ganadería continuaron siendo fundamentales, la metalurgia del cobre agregó una nueva dimensión a la vida cotidiana.
Cerámica y alfarería: Durante el Eneolítico, se desarrollaron técnicas avanzadas de alfarería y se produjeron cerámicas más elaboradas.
Asentamientos y comercio: Surgieron asentamientos más grandes y complejos, y el comercio se intensificó. Las comunidades intercambiaban productos y conocimientos.
Arte y simbolismo: El arte en esta época incluía pinturas rupestres, esculturas y objetos decorativos. Los símbolos y la espiritualidad también desempeñaron un papel importante.
La cultura de Los Millares | Yacimiento arqueológico Los Millares |
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La cultura de Los Millares es una de las civilizaciones más antiguas de la península ibérica y tuvo una gran relevancia durante la Edad del Cobre, aproximadamente entre el 3200 a.C. y el 2200 a.C. Este período marcó un hito en la historia de la humanidad, ya que fue el momento en el que las sociedades comenzaron a abandonar la vida nómada y a establecerse en asentamientos permanentes
Los yacimientos de Los Millares se encuentran en la región de Almería, en el sureste de España. El yacimiento epónimo de Los Millares, ubicado en el municipio de Santa Fe de Mondújar, es considerado uno de los más importantes de esta cultura en Europa y en el mundo. Además, en el año 2020, investigadores demostraron que Los Millares fue la primera ciudad establecida de toda la península ibérica, hace más de 5000 años | |
Características | |
Metalurgia del cobre | Fueron pioneros en la introducción de la metalurgia del cobre en el Mediterráneo occidental |
Asentamientos urbanizados | Los Millares se desarrolló en un espléndido entorno agrícola y contaba con asentamientos de cierta entidad y nivel de urbanización |
Fortificaciones | Los yacimientos millarenses se caracterizan por la presencia de fortificaciones, en contraste con las poblaciones neolíticas anteriores |
Necrópolis y enterramientos megalíticos | Los Millares también se destacan por sus necrópolis en el exterior de los poblados, con abundancia de enterramientos megalíticos colectivos, como los tholoi |
Intercambios y auge cultural | Durante este período, hubo un auge en los intercambios y una creciente complejidad cultural |
La cultura de Los Millares dejó un legado milenario que sigue fascinando a los arqueólogos y nos proporciona una visión única de la vida en la Edad del Cobre |
El Bronce Pleno - La Cultura del Algar | Copa argárica de arcilla |
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La cultura del Argar es una fascinante civilización prehistórica que se desarrolló en la Península Ibérica durante la Edad del Bronce, aproximadamente entre el 2200 y el 1550 a.C. Su origen se sitúa en la región de Almería, en el sureste de España1. Aunque a veces se le llama “olvidada”, esta cultura ha dejado una huella significativa en la historia prehistórica de la región | |
Características | |
Desarrollo y expansión |
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Economía y metalurgia |
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Jerarquías sociales |
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Arquitectura y arte |
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La Edad de los Metales
La Edad de los Metales en la península ibérica es un período histórico que se caracteriza por el desarrollo y uso de herramientas y armas de metal, lo que supuso un cambio significativo en la cultura y la sociedad. Este período se divide en tres fases principales:
Edad del Cobre o Calcolítico (aproximadamente 3000-2200 a.C.): Durante esta fase, se comenzó a trabajar el cobre, lo que permitió la creación de objetos más duraderos y eficientes que las herramientas de piedra. Se desarrollaron también las primeras formas de comercio a larga distancia y surgieron complejas estructuras sociales.
Edad del Bronce (aproximadamente 2200-800 a.C.): El bronce, una aleación de cobre y estaño, se convirtió en el material predominante. La metalurgia del bronce permitió la producción de una amplia variedad de objetos, desde armas hasta joyas. Durante este tiempo, se consolidaron las relaciones comerciales y culturales con otras regiones del Mediterráneo.
Edad del Hierro (aproximadamente 800 a.C. hasta la conquista romana): El hierro, más duro y abundante que el bronce, revolucionó la fabricación de herramientas y armas. Esta etapa está marcada por la aparición de culturas significativas como la íbera y la celta en la península, cada una con sus propias características artísticas y sociales.
La Edad de los Metales también se destaca por el desarrollo de asentamientos fortificados o castros, especialmente en la Edad del Hierro, y por la aparición de la escritura, que marca el final de la Prehistoria y el comienzo de la Historia documentada en la región. De este mismo periodo data la cultura talayótica de las Islas Baleares, con la construcción de murallas ciclópeas en la edificación de los poblados y la aparición de megalitos con formas muy peculiares como; Talayots, taulas y navetas
Cada una de estas etapas trajo consigo avances tecnológicos y cambios en la organización social y económica, lo que tuvo un impacto profundo en la evolución de las sociedades humanas en la península ibérica.
La cultura talaiótica | Poblado de Trepucó |
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La cultura talayótica es la etapa cultural que se desarrolla en las Islas Baleares, específicamente en Mallorca y Menorca, durante la Edad del Bronce y la Edad del Hierro. La etapa anterior al periodo talayótico se caracteriza por pequeños núcleos de población aparentemente igualitarios. Estos grupos se basaban en la agricultura de cereales y la ganadería de cabras, ovejas y, en menor medida, vacas y cerdos. La fabricación de cerámica y la metalurgia del cobre estaban presentes desde el principio. Entre 2200 y 1900 a.C., hubo influencias de la cultura del vaso campaniforme, que se difundía por Europa, el norte de África y el Mediterráneo. Sin embargo, esta influencia solo se observa en Mallorca, no en Menorca | |
Características | |
Aspectos funerarios |
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Homogeneidad cultural |
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Talayots |
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La cultura talayótica es uno de los periodos más interesantes y originales de la prehistoria de las Islas Baleares |
Lista de algunas de las especies
Homo | Descripción |
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Homo Habilis (†) | "Hombre hábil": Esta especie se caracterizaba por su capacidad para crear herramientas y conservarlas para un futuro uso |
Homo Rudolfensis (†) | "Hombre del Lago Rodolfo": Se conoce principalmente por un solo espécimen y su relación con Homo habilis es objeto de debate |
Homo Ergaster (†) | "Hombre trabajador": Se cree que es una variante africana de Homo erectus |
Homo Georgicus (†) | "Hombre de Georgia": Fue descubierto en Dmanisi, Georgia, y es uno de los primeros representantes del género Homo fuera de África |
Homo Erectus (†) | "Hombre erguido": Esta especie se extendió ampliamente por Asia y África durante el Pleistoceno medio y tardío |
Homo Antecessor (†) | Se encontraron fósiles en Atapuerca, España. Vivió hace aproximadamente 1.2 millones de años y se considera un posible antepasado de los neandertales y Homo sapiens |
Homo Heidelbergensis (†) | Vivió en Europa, África y Asia hace aproximadamente 600,000 a 200,000 años. Se le atribuye la fabricación de herramientas más avanzadas y la caza de grandes animales |
Homo Naledi (†) | Descubierto en Sudáfrica en 2013, su antigüedad es incierta, pero se cree que vivió hace entre 335,000 y 236,000 años. Su relación con otras especies sigue siendo objeto de investigación |
Homo Neanderthalensis (†) | “Neandertales”: Vivió en Europa y partes de Asia occidental hace aproximadamente 400,000 a 40,000 años. Estrechamente relacionado con los humanos modernos, se extinguieron hace unos 40,000 años |
Homo Sapiens | “Humanos modernos”: Somos la única especie de Homo que sobrevive actualmente. Nuestra historia se remonta a unos 300,000 años atrás en África |
De Atapuerca al Homo sapiens
Los restos más antiguos de la existencia de seres humanos en la Península han sido hallados en el yacimiento de la Gran Dolina, en la sierra de Atapuerca (Burgos). Estos hallazgos descubrieron un conjunto de restos humanos (86 fósiles pertenecientes a seis individuos) con una antigüedad de unos 800 000 años.
Los arqueólogos llegaron a la conclusión de que se trataba de una nueva especie de origen africano a la que llamaron Hamo antecessor (“explorador”), un antepasado común tanto del Hamo sapiens, nacido también en África, como del Hamo neandertha/ensis. El Hamo antecessor era muy parecido al Hamo sapiens y presentaba una capacidad craneal que podía superar los 1000 cm3
El Hamo neanderthalensis tenía un aspecto mucho más robusto (cejas prominentes, frente huidiza y grandes mandíbulas) y presentaba una capacidad craneal de 1500 cm3. La llegada a Europa del Hamo sapiens tuvo lugar hace unos 40 000 años y comportó la extinción progresiva de los últimos neandertales.